martes, 25 de septiembre de 2007

Camino


Capítulo 5º: El fin del camino

Recuerdo que tomé muchos otros caminos antes de acabar mi viaje. Sendas de todo tipo, físicas e imaginarias. Algunos buenos, otros crueles. Todos ellos caminos incorrectos. Caminos que empiezan, caminos que acaban, caminos que enseñan y caminos que matan. Todo son caminos. Algunos solo son de ida y en otros en cambio puedes tomar cualquier dirección. Pero al final, todo son caminos. Aprendí muchas cosas en mis viajes excepto una cosa: nunca supe qué camino era el que debía tomar.

No podría contabilizar el tiempo que pasé viajando entre caminos. El propio tiempo es uno, pero a la vez se sabe que el tiempo no existe. Es un sendero que no empieza hasta que posas un pie sobre él y que desaparece cuando lo levantas. Si no comprobé todos los caminos, comprobé aquellos que debía antes de tomar mi decisión de volver junto al guardián.

—Bienvenido —me recibió el guardián—. ¿Cómo ha ido tu búsqueda?

—Mal —respondí desanimado—. No he conseguido hallar ningún camino desde el que poder volver a empezar.

—Ya te advertí que había muchos caminos, pero solo una solución.

—Volver al principio —Dije completando su frase.

—Exacto —al oírlo supe que el guardián tenía que dejar que me equivocase para que llegara a comprenderlo bien—. Nunca haber venido aquí, repetir tu propio camino. Elegir de nuevo las decisiones.

—Pero ahora ya no puedo. ¿Olvidar todo desde que llegué aquí? Eso sería una abominación. He aprendido tanto en mi búsqueda.

—Si, pero aún así no has aprendido nada que te sirva en tu camino.

—No puedo abandonar los conocimientos simplemente.

—No puedes conservarlos en tu sendero.

—Pues entonces déjame quedar aquí.

—Aquí solo pueden permanecer la oscuridad y el guardián de los caminos —¿Fue una sonrisa lo que se dibujó en el rostro del anciano?—.Tu debes retomar tu camino.

—Pero puedo permanecer en los caminos. Habitar en las sendas que no me harán olvidar. Tú me lo permitirás ¿Verdad?

—Yo guardo los caminos, pero no soy su dueño. La oscuridad posee todo lo que hay dentro y fuera de ellos. Le pedí a la oscuridad que te ayudase y lo ha hecho. Ya no le puedo pedir más.

—Entonces no hay opción. Simplemente he venido aquí buscando un camino y no lo he encontrado. Y ahora he de olvidar todo lo que aprendí buscando —Creí saber mucho, pero mis palabras sabían más que yo—. Es como si solo hubiese venido para perder conocimiento.

—Tal vez ese fuese el camino que buscabas.

—No lo quiero. Dame otra oportunidad. Otra opción.

—Si es lo que deseas.

—¿Cómo? —respondí más sorprendido que enfadado—. ¿Si hay otra opción por qué no me la dijiste desde el principio?

—Por que al principio no estabas preparado. Ahora si.

—Muy bien, estoy dispuesto. Muéstramela.

Nací de la oscuridad, solo ella sabe cuanto tiempo llevo aquí. Esto es el final de lo caminos y yo soy el guardián de estos. Algunos estaban aquí antes de que yo llegase, otros aparecen y desaparecen, pero están todos. Los caminos nunca se pierden, sencillamente se olvida como llegar a ellos.

3 comentarios:

Adam Reiss dijo...

Me mola este final ^^
Está bastante chulo

Adam Reiss dijo...

Ums curioso cambio de imagen, mola :P

Ikad dijo...

Gracias wapo, a ver si ahora subo algo y lo estreno :)